Todos quisiéramos que se cumplieran todas nuestras peticiones, pero cuando todo es tomado tan literal, comienzan los problemas.
Estas personas llegan a sorprender por los demasiado literal que fueron al cumplir algunos pedidos.
“Nuestra hija se quedó dormida en el auto. Al llegar a casa, le pedí a mi esposo que la llevara a la cama. Lo hizo tal cual”
Cuando pides medio litro de cerveza
“Mamá pidió que solo llevara rollos para cenar”.
“Ordené una hamburguesa con lechuga”.
“Mi esposa pidió llevar la comida al horno a 120 grados. Tuve que esforzarme, pero lo logré”.
“Mi doctor me dijo que necesitaba comer más cosas verdes”.
“Mamá me pidió colocar un rollo de papel en la repisa”
No fue lo que quiso decir
“Mojé mi móvil. Le pedí a mi abuelo que lo pusiera en el arroz. Él pensó que quería que lo cociera con arroz”.
“Pedimos hongos en un restaurante chino”.
“Le aconsejé a mi esposa instalar en su móvil un recordatorio. Pero no es esto lo que quería decir”.
“Mi novia quería un pastel arcoíris. No entiendo qué es lo que no le gusta”.
“Mamá le pidió a papá que pusiera un árbol de Navidad ’inusual’ que no tuviera que decorar”.
“No, no queremos doble porción de pepperoni, una será suficiente”, dijimos.
“Le dije a mi nuevo empleado que necesitaba una copia de su pasaporte”.
“Soy un futuro chef. Ayer le pedí a mi novia ayudarme con la cena: pelar la mitad de las patatas de la bolsa”.
“No fue una buena idea pedirle a mi hijo en la tienda que me diera una mano”.
“Mi hermano tuvo que trabajar en la fiesta, así que me pidió que le dejara de todo un poco”.
Ella pensó que brindar era comer tostadas, por lo iguales que suenan en inglés.
Han sido muy literales, ¿no crees?