La cera que se genera en nuestros oídos se genera para evitar que las bacterias y la suciedad entre en el canal auditivo, por eso es un líquido pegajoso que mantiene nuestras orejas limpias, saludables y funcionales. Sus principales componentes son los queratinocitos demascados, ácidos grasos de cadena larga, tanto saturados como insaturados, alcoholes, escualeno y colesterol.
Cuando sientas que tienes mucha cera en tus oídos debes tomar un paño húmedo y limpiarla, o de lo contrario utilizar un hisopo. En este caso asegúrate de no insertarlo en tu canal auditivo porque puedes dañar tu tímpano.
Estos son los diferentes colores de cera y qué significa cada uno de ellos para tu salud:
Amarilla, húmeda y pagajosa
Este es el tipo más común de cera en adultos. Su textura es húmeda y pegajosa, evita que el canal auditivo se seque y lastime.
Gris
Esta cera no es muy común, pero si la ves, entonces tiene que ver con el resultado del proceso de limpieza natural de tu oreja. Si la cera es seca y quebradiza y sientes picazón, podría ser signo de eczema. Si tienes estos síntomas lo mejor es acudir al médico.
Amarillo pálido
Pegajosa y oscura
Si la cera es más oscura de lo normal esto indica que el cuerpo está transpirando más de lo habitual. Cuanto más oscuro sea el color, mayor será la probabilidad de que este sudor extra conduzca al olor corporal. Pero fuera de esto, es completamente saludable.
Seca, blanca y escamosa
Este tipo de cera es normal y saludable. Las personas que lo producen suelen tener menos olor corporal que las que producen cera más oscura. Se cree que este tipo es más común en la población asiática.
Húmeda y líquida
Es normal que la cera salga de nuestros oídos de vez en cuando, es sólo parte del proceso de limpieza natural. Pero cuando la cera se derrama desde tus oídos en grandes cantidades y contiene pus o sangre, entonces es un signo de un tímpano perforado. En este caso busca atención médica inmediatamente. Puede ser también líquido cefalorraquídeo.
Cera con sangre
La cera puede aparecer son sangre seca, si lo notas, busca atención médica, ya que podría significar que tienes un tímpano perforado.
Recuerda que los conductos auditivos tienen autolimpieza, así que no hay necesidad de insertar un algodón en su interior.