Deru tuvo la fortuna de que sus rescatistas llegaran a tiempo. Ahora ya recuperado sólo espera tener un vida llena de felicidad.
Un perrito que logró vencer a la muerte ahora tiene una familia que lo llena de amor. Este can fue encontrado ahorcado y con el cráneo roto tras una terrible tortura que casi lo mata, pero de la que logró recuperarse de milagro.
Deru necesitó una cirugía de emergencia debido a la fractura de cráneo que sufrió y a una embolia espinal que es u bloqueo repentino d una arteria en su médula espinal.
Los golpes en la cabeza casi lo matan y no hay que pensar mucho para darse cuenta que esto lo hizo alguien desalmado pero afortunadamente este perrito llegó a la organización benéfica Vizslamentes.
Este caso se dio en Hungría y aunque el perro se recuperó en dos años, luego tuvo una recaída. Hoy Chris y Lara Jessop son su familia.
«Lo encontraron con una soga de metal atada alrededor de su cuello, por lo que los veterinarios piensan que alguien había tratado de colgarlo. Tenía solo seis meses cuando lo encontraron, simplemente no vale la pena pensar que alguien podría hacerle eso a un cachorro», dijo Lara a Daily Mail.
«Es un milagro, pero llegó a donde está, es el perro más resistente que he conocido. Incluso cuando se derrumbó dos años después, realmente no lloró, se podía ver en su rostro, parecía petrificado, pero no estaba llorando ni sollozando. Es un campeón tan valiente. Es un alivio enorme que ya no esté tomando analgésicos», comentó Lara.
Sin embargo volvió a sufrir debido a la membrana donde sufrió la embolia. Esta comenzó a hincharse y a hacer presión sobre su columna por lo que recibió terapia con láser y fisioterapia, además de contar con una dieta equilibrada.
«Recuerdo cuando hicimos los Tres Picos de Yorkshire y nos dirigíamos al aparcamiento al final y me eché a llorar al mirarlo. Estaba tan orgullosa de él, que hubiera pensado que este perro que ni siquiera podía caminar o ponerse de pie hace 18 meses estaría marchando alrededor de los Tres Picos», dijo Lara.
«Siempre supimos que sus heridas eran tan severas que su atención sería de por vida o continua. Todavía recuerdo el día que colapsó como si fuera ayer. Lo encontré en la cocina en su cama y cuando trató de ponerse de pie se cayó al suelo. Grité por Chris y lo llevamos directamente a los veterinarios de emergencia. Sabíamos que eran sus viejas heridas las que habían vuelto para perseguirlo».
Ahora Deru está sano y goza de mucha alegría sin la necesidad de medicina ni tratamientos.
«Ha sido un viaje largo y no es el mismo perro que hizo los Tres Picos de Yorkshire. En los paseos, tengo que llevarlo sobre algunos de los montantes y no puede caminar y olfatear el suelo como lo hacen otros perros. Pero todo lo que siempre quisimos para él fue vivir una vida feliz y saludable y creo que hemos cumplido nuestra misión», declaró Lara.