“Me siento segura y amada con él. Hay 14 años de diferencia entre nosotros (ella tiene 33 y él 19), pero no lo pienso dos veces” dijo la instructora de yoga que sólo quiere que su familia conozca al hombre de su vida.
La instructora de yoga de Londres, Inglaterra hizo un viaje de 10 días para enseñar yoga en el país latinoamericano, antes del cierre de este país por la pandemia, y encontró el amor en un joven del Amazonas. Tan fuerte es el sentimiento que dice que ya no volverá a Europa.
Caroline Knight de 33 años es profesora de yoga de Stoke Newington en Londres y había programado un viaje para enseñar esta práctica en Hoja Nueva, en un retiro en pleno Amazonas. Al llegar a ese lugar conoció a Rómulo Elier Huaman Roque de 19 años, oriundo de la Amazonía peruana que se dedica a cultivar cacao.
Ella conoció a Rómulo cuando viajó a Puerto Maldonado en el Amazonas. Él cultiva cacao y cuida de sus animales. “Desde Puerto Maldonado fue un viaje de dos horas, otro en bote y una caminata para llegar al retiro. Me sentía muy cansada cuando llegué, pero el lugar tenía una energía increíble y en poco tiempo estaba reflexionando sobre los planes para extender mi estadía para poder ver más de Perú”, comentó Caroline a Daily Mail.
Rómulo salía con Caroline y sus compañeros, pero era tímido y callado. Aún así ella se fijó en él. “En alguna ocasión en que conseguí que Rómulo charlara solo, me pareció muy agradable y genuino. Los sentimientos que tenía por él eran más intuitivos que obvios”, explicó la joven.
Cuando decretaron cuarentena en Perú, Caroline decidió volver a Puerto Maldonado. “Decidí buscar una habitación a 10 libras la noche en Puerto y esperar a que pasara la cuarentena”, contó a Daily Mail. Ella se quedó en una cabaña muy precaria.
Fue ahí cuando se dio cuenta de que extrañaba a Rómulo, pero no podía saber de él ya que no tenía celular. Tras 10 días, Rómulo dejó en Facebook un mensaje para Caroline que decía: “tengo algo que decirte, creo que te amo”, a lo que la instructora respondió “creo que también te amo”.
Luego Rómulo volvió la selva y Caroline se quedó sola. Todos sus compañeros habían regresado al Reino Unido. Luego de tres semanas su amor amazónico volvió para invitarla a vivir con su familia. Hoy viven en una cabaña de madera. “Es en realidad solo un patio con un techo de metal corrugado y una colección de cubículos improvisados para habitaciones”, explicó Caroline.
cuando se instalaron, Rómulo le contó a Caroline de las plantaciones de cacao y ahora ella tamibén se dedica a eso. Hoy ellos venden sus productos en su Instagram.
“Solía dirigir una empresa de té de hierbas y todavía conozco a muchos propietarios de negocios gastronómicos; algunos de ellos se han dado cuenta rápidamente del valor de nuestro producto”, dijo Caroline y añadió: “esos primeros pedidos están empaquetados, listos y esperando para ser enviados al Reino Unido. Realmente espero que podamos convertirlo en un negocio”.
Caroline espera que su familia pueda conocer a Rómulo. “Me siento segura y amada con él. Hay 14 años entre nosotros, pero no lo pienso dos veces” dijo la instructora de yoga. “Rómulo puede ser tranquilo y reservado a veces, pero también tiene un lado juguetón, cariñoso y de mente abierta. Incluso hemos hecho tiempo para practicar yoga desnudos cuando podemos encontrar un espacio privado”, finalizó.