Una pareja de origen indio mantenía a la anciana viviendo en un armario. Ella debía realizar todos los quehaceres del hogar. Un día la mujer sufrió un derrame cerebral y al llegar la ambulancia la encontraron desnutrida y empapada de orina.
Un matrimonio inmigrante de Australia raptó a una mujer de edad para que trabajara en su casa por 8 horas al día sin descansar. Por fortuna fueron descubiertos y deberán enfrentar cargos como informa Daily Mail.
Kandasamy y Kumuthini Kannan son una pareja de la India que vive en Melbourne, Australia donde criaron a sus 3 hijos que crecieron viendo como sus padres trataban a una anciana que en el 2007 comenzó a vivir con ellos a la fuerza.
El matrimonio raptó a la mujer y la hizo su asistente de limpieza. Un día no la dejaron salir y según declara la anciana, fue “encerrada en un armario como a Harry Potter”.
Por 8 años la anciana fue tratada muy mal. La dueña de casa le arrojaba té caliente para castigarla. Si cocinaba mal una salsa, la mujer se la tiraba en la cabeza y era la anciana la que debía limpiar sin descanso alguno. Incluso a veces era tal el cansancio de la mujer esclavizada que esta dormía en el pasillo y despertaba cuando sus captores gritaban.
Fue el 2015 cuando la policía supo de esta situación debido a que una ambulancia entró a la casa cuando la anciana sufrió un derrame cerebral sobre su orina. Ella pesaba sólo 40 kilos. Habría sido el matrimonio quien llamó a la ambulancia diciendo que “la abuela se había desmayado”.
Pero la mentira no triunfó, ya que la anciana presentaba signos evidentes del maltrato físico y psicológico que recibía. La anciana no tenía dientes debido a que ella misma se los habría quitado por la desesperación en la que vivía.
Kumuthini, la mujer, llegó sonriendo creyendo que lograría su libertad pero la jueza la condenó a ella y a su marido a 25 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad que perpetraron 8 años.
La sentencia se dio luego de que el tribunal creyera que la anciana mentía porque los relatos parecían ficticios para los tiempos actuales.
Kandasamy y Kumuthini Kannan, estarán largos 25 años en una cárcel australiana mientras que sus hijos quedarán huérfanos, por lo que es posible que se busque quien los adopte.