Kimberly Fugates es madre de una niña de 10 años, pero a los 41 años recibió una noticia que realmente no esperaba.
Notó que su período no llegó en la fecha acostumbrada y fue directo al doctor. Entonces un ultrasonido reveló que la mujer no solo estaba embarazada, sino que había 3 criaturas en su vientre.
Esto es bastante inusual, ya que las probabilidades de tener trillizas idénticas son muy bajas y además en una persona de su edad, prácticamente todo era un milagro.
Todavía estaban incrédulos de lo que estaba sucediendo, pero comenzaron a planear todo para la llegada de las trillizas. Se mudaron a una casa más grande y prepararon sus habitaciones. Además ella actuaba con mucho cuidado, ya que un embarazo de esa magnitud puede ser muy complicado.
Cuando ya tenían todo listo para recibirlas, recibieron otra impresionante sorpresa. Poco antes que se cumplieran los 9 meses de gestación debieron intervenir con un parto prematuro, ya que el vientre era muy pequeño.
El doctor comenzó la operación y cuando ya había sacado a todos los bebés, de pronto gritó: ¡Hay más pies!. Nadie podría creer lo que había escuchado, el embarazo no era de trillizas, sino de cuatrillizas. Ese día la familia se iría con 4 bebés a casa.
Nadie se esperaba esta sorpresa, ni siquiera los médicos. Al parecer una de los bebés se había escondido detrás de sus hermanas todo el tiempo y ni las ecografías la mostraban.
Kimberly dijo: “Soy la madre más bendecida del mundo”, y no era para menos, ya que a esa edad, dar a luz a 4 bebés es impresionante.
Los bebés permanecieron algunos meses en el hospital para terminar su desarrollo y cuando estuvieron listas pudieron irse a casa.
“No puedo imaginarme la vida sin mis preciosas bebés. Han traído tanta alegría, no solo a mi vida y la de mi familia, sino también a la de la comunidad”
Una maravillosa historia con un final feliz.
