Luego de que pasaron 30 años del gran desastre en Chernobyl, Vadimir Migutin, un fotógrafo profesional, se aventuró a visitar el lugar para capturar algunas imágenes con un filtro infrarrojo. Lo que logró fueron una serie de escenarios que revelan cómo después de un accidente nuclear y el abandono del hombre, los bosques, plantas y los animales, parecen prosperar.
Vladimir Migutin nació en 1986 en Bielorrusia, el mismo años que sucedió la catástrofe. Cuando tenía 5 años su familia abandonó la Unión Soviética y ahora, que tiene 32 años, decidió visitar algunos ligares en Minsk, donde tenía recuerdos de su infancia.
Con este viaje le surgió la idea de visitar Chernobyl y armado con una cámara con un filtro infrarrojo se aventuró a la zona de exclusión y capturó estas hermosas fotografía.
Simón, un zorro amistoso con los humanos, que se acerca a los grupos en la zona de exclusión para pedir comida
Pripyat, la ciudad fantasma
Mariposas y flores en el bosque
La icónica rueda de 26 metros de altura en el parque de atracciones de Pripyat
Ambos lados de un camino que aún conservan los nombres de las aldeas evacuadas
Autos chocadores en el parque de atracciones
Un piano de cola en la sala de conciertos en la abandonada ciudad de Pripyat
Sala de deportes abandonada
Parte de una máquina que se usaba para limpiar el techo después de la lluvia cuando los reactores fallaban
Las imágenes son muy impresionantes.