Si tu gusta comer pescado, entonces más de alguna vez te habrás topado con esta situación. Estás disfrutando un montón tu trozo, cuando de pronto sientes que algo extraño te roza y daña la garganta, es una espina que se camufló en la carne del pescado y no sabes cómo lidiar con el desesperante problema.
Por suerte existen algunos trucos sencillos que puedes aplicar de inmediato, para no seguir sufriendo y eliminar las posibles consecuencias.
Tose
Apenas sientas el pinchazo de la espina lo primero que debes hacer es toser, pero con cuidado. El cuerpo va a reaccionar solo ante estos factores irritantes y nocivos para la garganta, por lo que si toses durante algunos minutos, el aire que sale de los pulmones podrá expulsar lo que está atascado.
Bebe aceite vegetal tibio
Esto te podría molestar un poco por el sabor, pero es lo mejor para que la espina resbale con facilidad por tu garganta y te ayude a quitar la inflamación.
Toma vinagre
El vinagre te ayudará a mover la espina, ya que la diluirá. El único problema es que esto sucederá luego de un largo tiempo.
Moja el pan en agua tibia
Para remover la espina es efectivo introducir un pedazo de pan remojado en agua tibia, así la masa se hará viscosa y ayudará a remover la espina.
Bebe agua
Si tomas un poco de agua, la espina bajará a tu estómago y en ese lugar no será difícil digerirla, por lo que no te lastimará.
Traga algo suave
Si comes algo de consistencia suave como un plátano, un malvadisco, arroz cocido o puré, podrás mover la espina y tragarla fácilmente.
Ve al médico
Si ninguno de estos métodos funcionan, entonces debes acudir a un centro médico para que un especialista te ayude.
Si notas que hay sangrado, aunque sea poco, no intentes por ningún motivo sacar la espina por tus propios medios.
Cuando ya hayas podido eliminar la espina de tu garganta quizás sientas que aún sigue ahí, pero es normal, es un efecto temporal. Para deshacerte de la sensación puedes tomar una ducha tibia para relajar los músculos y suavizar la garganta. También puedes comer algo suave, como avena, o hacer gárgaras con algún antiséptico, así la herida en la garganta no se inflamará.