Un hombre sin hogar está en las calles de Nueva York pidiendo ayuda o cooperación para poder pasar el día, pero muy pocas personas se le acercan, algunos lo regañan e incluso lo juzgan. Sin embargo cuando un niño se sienta a su lado a pedir lo mismo que él, las personas reaccionan de una manera muy diferente.
Este experimento social intenta comprobar cómo reacciona la gente frente a un hombre sin hogar y un niño en las mismas condiciones.
Primero se puede ver que el hombre fue juzgado y avergonzado por la gente.
Pero luego se ve que el niño fue apoyado por mucha gente que se acercó a él.
Pero el hombre sorprendió a todos cuando antes de irse del lugar le compró comida al chico “sin hogar”.
“Las personas olvidarán lo que dijiste, olvidarán lo que hiciste, pero nunca olvidarán cómo los hiciste sentir”.
– Hombre sin hogar
Mira acá el experimento completo: