Una mala alimentación, poco ejercicio, una vida poco saludable: esos descuidos pequeños se van acumulando para originar un enemigo en nuestro cuerpo capaz de hacer que nuestras defensas bajen, dejándonos vulnerables a la invasión de agentes infecciosos.
Cambios de temperatura y aglomeraciones de gente nos ponen en riesgo de coger un resfriado y una gripe. Los síntomas empeoran hasta llegar a una tos que nos sigue a lo largo del día, un extraño silbido en nuestro pecho y dificultad para respirar, flemas, etcétera. Una compilación de síntomas que puede derivar en neumonía.
La bronquitis es una inflamación de la mucosa bronquial que casi siempre sigue a un resfriado o a una infección seudogripal causada por n virus. Debe tratarse inmediatamente.
Si alguna vez sufriste una bronquitis por más de dos semanas, entonces se trataba de una bronquitis aguda. Sus síntomas son igual de severos, pero de corta duración. En ella, los virus atacan el tracto respiratorio y los conductos de los bronquios.
La bronquitis crónica puede durar meses e incluso años. Los tubos bronquiales se inflaman, irritan y producen un exceso de mucosidad. La sintomatología se agrava si somos fumadores.
Cuando padecemos de bronquitis, lo primero que debemos hacer es seguir el tratamiento médico, además de llevar una vida saludable e incluir en nuestra dieta todos los alimentos que pueden beneficiarnos.
Para paliar la bronquitis: Vitamina A, C y Zinc
El zinc puedes hallarlo en semillas como la de calabaza, los cacahuetes, las otras, el germen de trigo y los mejillones.
La cebolla es un gran expectorante que te puede ayudar mucho, así como las semillas de sésamo junto a un poco de linaza y miel, e inclusive el jengibre y la achicoria.
Durante una bronquitis no es recomendable que tomes lácteos, pues suelen complicar tu cuadro respiratorio.
Tres infusiones saludables para tus bronquios
Un simple jugo de limón con miel es algo clásico e infalible: nos ayuda a aliviar la infección y hasta nos ayudará a bajar los síntomas por un rato si está caliente. Pero también hay otras infusiones y plantas medicinales que nos pueden ayudar con la bronquitis.
#1 Infusión de corteza de roble y llantén
Ambos elementos podemos encontrarlos en las herboristerías y tiendas naturistas, y son perfectas para tratar cualquier clase de problema respiratorio e incluso bajar las infecciones e inflamaciones.
Haz primero un jugo de naranja, tempéralo con agua caliente y añádele la corteza de roble y unas hojas de llantén. Deja que llegue a la ebullición y bébelo con miel.
Consume una taza por la mañana y otra antes de acostarte para aliviar tus síntomas de la bronquitis.
#2 Té o infusión de árbol de eucalipto
Sus propiedades medicinales son muy recomendadas para quienes sufren gripes, resfriados, dolores de garganta y pesadez en el pecho. Sus principios expectorantes y antitusivos son bastante beneficiosos, así que debemos aprovecharlos.
Para prepararla, sólo necesitas unas hojas de eucaliptus. Calienta una taza de agua con las hojas adentro hasta que llegue a ebullición. Déjala reposar por 5 minutos, procede a filtrarla y añade una cucharadita de miel. Disfruta de esta infusión en la media tarde o en la noche.
#3 Infusión de hojas de malva
Este es un maravilloso expectorante que alivia las flemas y el ardor y cansancio de nuestro pecho Además nos servirá para aliviar los síntomas del catarro, de la tos e incluso de la afonía.
Toma esta infusión entre 2 y 3 veces al día,e incluso puedes realizar vahos o gárgaras con ella para que se desinflamen tu garganta y oídos. Así se irá mejorando tu respiración de a poco. Encuentras las hojas de malva en tu herboristería más cercana.
