Siempre están en un segundo plano, pero son las primeras en estar al frente de la batalla misma. El trabajo de una enfermera nunca es agradecido como lo es la labor del médico. Se trata de una profesión poco valorada por las personas.
Una enfermera debe obedecer las órdenes del médico. Pero ellas son lo que realmente están en contacto permanente con el paciente. Los tratan, cuidan y deben velar por su recuperación.
Sin embargo, muchas deben lidiar con personas y pacientes que, lejos de valorar su labor, prefieren ser ofensivos y y las culpan por cualquier deficiencia o problema que tiene el Estado con los hospitales.
Así le ocurrió recientemente a una enfermera llamada Caitlin Brassington. La mujer se topó con alguien que conocía en el supermercado. Quedó perpleja al ver cómo la menospreció por su profesión. Ella es una persona profesional, educada y está acostumbrada a tratar con la gente, por lo que prefirió quedarse callada y responder con un mensaje en su cuenta de Facebook.
Su sorprendente respuesta ya acumula más de 20.000 likes y 3.800 compartidos.
“Sólo una enfermera
‘Solo una enfermera’. Acabo de volver a casa después de un día muy movido, vistiendo mi ordinario uniforme de enfermera. En el camino, pasé a la tienda a comprar leche y me encontré con una conocida. Ella nunca me había visto usando mi uniforme, y me dijo que no sabía que fuese ‘sólo una enfermera’. ¡Guau! En mis 18 años de carrera he oído esa frase muchas veces, pero hoy me llegó al alma. ¿Acaso soy sólo una enfermera?
He ayudado a traer bebés a este mundo, muchos de ellos con ayuda para poder respirar por primera vez pero, claro, soy sólo una enfermera.
He sostenido las manos y asegurado dignidad a muchos pacientes en su último aliento pero, claro, soy sólo una enfermera.
He aconsejado a algunos padres que están en duelo después de la pérdida de su hijo pero, claro, soy sólo una enfermera.
He hecho la reanimación cardiopulmonar a pacientes y los he traído de vuelta a la vida pero, claro, soy sólo una enfermera.
Soy los ojos, oídos y manos de los médicos, tengo capacidad de diagnosticar, tratar y controlar enfermedades pero, claro, soy sólo una enfermera.
Puedo auscultar los pulmones de un recién nacido y diagnosticar cualquier problema respiratorio
pero, claro, soy sólo una enfermera.
Puedo enseñar y formar a pacientes, cuidadores y enfermeros novatos pero, claro, soy sólo una enfermera.
Soy la voz de mis pacientes en un sistema de salud que no siempre antepone sus necesidades en primer lugar pero, claro, soy sólo una enfermera.
Me seguiré perdiendo Navidades, cumpleaños de mis hijos y los actos escolares para venir a trabajar y cuidar de aquel que tú quieres pero, claro, soy sólo una enfermera.
Puedo sacar sangre, intervenir y coser una herida pero, claro, soy sólo una enfermera.
Puedo controlar un paro cardíaco en un recién nacido, un niño o un adulto pero, claro, soy sólo una enfermera.
Te puedo decir la dosis de adrenalina que necesita tu hijo, según su peso, para devolverle a la vida pero, claro, soy sólo una enfermera.
Tengo la experiencia y el conocimiento para salvar la vida de las personas, pero sólo soy una enfermera, ¡Y estoy muy orgullosa de serlo! “
Caitlin recibió innumerables muestras de apoyo de muchos usuarios y de parte de compañeros de profesión quienes no han dudado en replicar el mensaje para que todos lo lean. Nosotros igual lo hacemos.