Los animales nos sorprenden cada día más por sus actos desinteresados de amor y cuidado, incluso si se trata de dos especies tan diferentes que muchas veces podrían llevar a quitarse la vida entre ellos.
Evan Schiller y Lisa Holzwarth, ambos fotógrafos, fueron testigos de una de las interacciones de la vida salvaje más increíble. Los animales protagonistas se comportan de una manera realmente conmovedora y asombrosa.
Mientras la pareja paseaba en un safari en el campamento Selinda en el norte de Botswana, en África, se encontraron con una gran tropa de babuinos que se lanzaban a través del monte. Según recuerda Lisa, de pronto unos 40 de ellos se acercaron haciendo mucho ruido.
Los babuinos estaban asustados porque dos grandes leonas estaban en la hierba alta, lanzándose hacia los monos. Unos segundos después aparecieron dos leonas más.
Un babuino bajó del árbol y trató de correr, pero fue capturado rápidamente por una leona. No sobrevivió.
Pero unos segundos después la leona se percató de que el babuino no estaba solo, sino que su pequeño bebé de apenas unos meses de vida, estaba aferrado al cuerpo de su madre.
Como era muy débil para escapar y trepar el árbol, la leona lo vio y en lugar de atacarlo, comenzó a jugar con él. Fue muy amable y cuidadosa, hasta que de pronto lo tomó con su hocico y comenzó a cuidarlo.
Lo abrazó y lo protegió de un león que intentó atacarlo.
Pero a pesar de que el bebé estaba a salvo, por el momento, el padre de la criatura esperaba en un árbol cercano para salvarlo de los leones. Entonces cuando se presentó la oportunidad, el macho descendió del árbol, agarró al bebé y volvió aun lugar seguro.
El pequeño sobrevivió y ahora estaba a salvo en los brazos de su padre.