Maxine es una adorable perrita de raza Corgi y es bastante única, pues suele acompañar a Bryan Reisberg (su humano) a su trabajo todos los días, y de la manera más tierna: montada en su espalda.
Bryan extrañaba mucho a su fiel amiga peluda, así que un día decidió llevarla a la oficina para no dejarla sola todo el día en su casa.
Pronto, todos sus compañeros y compañeras de trabajo aceptaron a la nueva integrante del equipo, y ahora va con él todos los días al trabajo para darle alegría a todo el personal.
Bryan y Maxine viven y trabajan en Nueva York. Para evitarle el estrés que vendría con hacerla caminar a diario entre la enorme cantidad de personas que siempre van por sus calles, el joven ha preferido llevarla en su mochila.
Lo mejor de la amorosa Maxine es que es lo suficientemente pequeña para caber perfecto en una mochila.
Maxine va junto a su humano por la calles de Nueva York regalándole sonrisas a todos las ajetreadas personas que se crucen con ella en su camino al trabajo.
La perrita logra tanta atención, que un día Bryan decidió grabar las intrigadas y asombradas miradas a su alrededor:
Y es que nadie podría encontrarse con Maxine en la calle o en el metro, y sonreír o querer hacerle cariño.
¡Qué tierna perrita!
