Es bastante conocido que entre las mascotas y los bebés o niños pequeños se crea un vínculo especial. Generalmente los gatos y los perros adoptan, cuando llega un recién nacido a la familia, un rol protector de manera instintiva.
Este es el caso de este gato que lleva protegiendo al bebé desde hace meses antes que naciera, como muestran estas fotos en las que se acomoda sobre el vientre de la futura madre.
Los divertido de esta situación es que cuando nació el bebé nada cambió. El felino siguió protegiendo al pequeño luego de salir del vientre de su madre.
Esta es una muestra más del vínculo espontáneo que se forma y que demuestra las grandes ventajas de tener un animal como parte de la familia, sobre todo si se esperan niños.