Los gobiernos ya están comenzando a tomar acción y crear alternativas para poder recuperar a sus países de la crisis económica que afectó al mundo a raíz de la pandemia del COVID-19 e Italia no se ha quedado atrás.
Como parte de un decreto para reactivar la economía el gobierno italiano asignó un total de 55.000.000.000 de euros en este tipo de proyectos, entre los que se encuentra el “eco-bono” o bono-ecológico, el cual apunta a que los ciudadanos puedan instalar gratuitamente paneles solares en sus hogares.
El proyecto se trata de un incremento de apoyo a las instalaciones fotovoltaicas y sistemas de almacenamiento asociados con estos proyectos, que van de 50% a 110% de reembolso de los impuestos.
Se lanzaron en conjunto proyectos de renovación de edificios enfocados de manera sostenible, los cuales tendrán también un reembolso de 110% de sus impuestos. De todas formas, el gobierno impuso un precio máximo de 2.400 euros por kilovatio instalado para sistemas fotovoltaicos, por lo tanto, quienes construyan sus proyectos con componentes de alta calidad, deben pagar gastos adicionales.
“Para el sector, el Decreto de relanzamiento es sin duda una gran oportunidad para la difusión de la energía fotovoltaica en los techos de las casas italianas.
Sin duda es una oportunidad para calificar al sector con estrategias integradas basadas en la calidad y la profesionalidad, como asociación trabajaremos para comunicar la necesidad de este tipo de enfoque.”
Paolo Rocco, Viscontini, presidente de la asociación fotovoltaica Italia Solare
Visconte asegura que es necesario que estén garantizados 5 años de este proyecto, para que pueda dar frutos, “solo de esta manera creemos que se pueden crear habilidades y sobre todo, empleos estables”.
Italia ha sido uno de los países más afectados por la pandemia del coronavirus, por lo cual este tipo de medidas para reactivar la economía son urgentes.
