Sin duda el papel de los animales en el arte es destacable y fundamental, regalándonos momentos memorables en el cine y la televisión, por ejemplo. Aunque muchos, válidamente, pueden protestar porque opinan que estos animales deberían estar en libertad en lugar de ser usados por lucro, lo cierto es que generalmente los animales actores son especies rescatadas y cuidadas en cautiverio porque no es posible que vuelvan a su hábitat natural.
Bart the Bear II es uno de ellos. Es un oso de Hollywood que realizó apariciones grandes en exitosos programas, como la recordada serie de HBO, Game of Thrones.
Este mamífero de 635 kilos tuvo una vida llena de acción y papeles notables en el mundo artístico. Por ello es que su reciente deceso dolió tanto, en especial para Vital Ground Foundation, un equipo dedicado a la conservación del hábitat de los osos grizzly como Bart.
Por muchos años, Bart fue embajador de la especie, que demostraba la necesidad de preservar su especie y los espacios que habitaban.
Por ello es que desde su cuenta de Instagram, la fundación realizó una emotiva publicación donde queda claro que fue un gran animal y que lo recordarán por siempre.
“Estamos desconsolados por compartir la noticia de que el amado embajador de Vital Ground, Bart the Bear II, falleció durante el fin de semana”, escribió la fundación. “Bart murió pacíficamente en su casa en Heber City, Utah, luego de un deterioro en su salud este año. Tenía 21 años”.
“Bart vivió una vida sumamente descomunal llena del amor y el cuidado de sus entrenadores y compañeros de toda la vida, los cofundadores de Vital Ground, Doug y Lynne Seus. (…) estamos agradecidos por su conexión con los osos pardos y por la vida y el legado de Bart como embajador de la conservación de sus primos salvajes”.
Su vida, sin embargo, no siempre fue fácil y llena de amor. Luego de nacer, su hermana y él quedaron huérfanos cuando su madre fue asesinada por un cazador. Luego de ser rescatados, fueron llevados donde estaba el primer Bart. Aquel oso estaba enfermo, pero este nuevo osezno se convertiría en su sucesor.
Con 21 años, tuvo una larga vida. Esto especialmente considerando que su especie sobrevive entre 20 y 25 años. Por suerte, pese a los capítulos trágicos al inicio de su vida, siempre tuvo los cuidados de una familia y una fundación que buscó su bienestar.