En las calles de Detroit, Michigan, fue encontrado un perro cubierto solo de cartones, bolsas de basura y un recipiente de plástico. Todo estaba rodeado de nieve y había apenas 1ºC, por lo tanto las probabilidades de que sobrevivieran eran muy bajas.
Terri Looby, voluntaria del Grupo Bienestar Animal en Detroit (DAWG), recibió un llamado cinco días antes de Navidad ya que habían visto un perro deambulando por la nieve, así que debían recatarlo rápidamente para que pudiera sobrevivir.
La mujer llamó a una compañera de trabajo y ambas comenzaron a buscar al perro por las calles que le indicaron, pero no encontraban nada. Hastaque de pronto divisaron una pila de basura y un animal sobre unos cartones que lo ayudaban a generar calor.
“Cuando pasábamos por la basura, noté que había un perro enrollado en la bola más pequeña posible”
– Terri Looby
El perro estaba congelado y al borde de la muerte. Se acercaron a él y Ollie, como fue nombrado, comenzó a mover la cola animosamente, eso sorprendió a sus salvadoras. Entendió que estaba a salvo y de un salto se subió al vehículo.
En el auto había una hamburguesa de pollo de las mujeres y Ollie la olió, pero no la comió hasta que obtuvo la aprobación de ellas.
“Le dijimos que estaba bien, que se la comiera. El la agarró tan rápido como pudo”.
– Terri Looby
Cuando partieron rumbo al refugio una señora se les acercó y es contó que el perro había sido abandonado hace una semana por sus dueños. Pero la notoriedad de las costillas de Ollie evidenciaban que había sido abandonado hace meses.
Lo llevaron a un veterinario en donde descubrieron que no tenía más 2 años y presentaba una ruptura del fémur.
Ahora solo queda esperar la operación y que pronto sea adoptado por una familia que lo quiera y respete.