Una de las reglas o tradiciones de los matrimonios es que las damas de honor lleguen todas vestidas iguales para que se distingan del resto de los invitados, pero esto no significa que sea una norma que todas quieran seguir, especialmente si tu hermana se va a casar y te dice que “puedes usar lo que quieras”.
Deanna Adams (40), preparaba su boda y le dio la libertad a sus damas de honor para que usaran la vestimenta que ellas quisieran. Dentro del grupo se encontraba su hermana Christina, quien definitivamente se tomó muy enserio las palabras y sorprendió a todos en la boda.
«Hace alrededor de un año, mi hermana mayor me escribió para preguntarme si quería ser su dama de honor. Ella, sabiendo que no soy una gran fanática de los vestidos formales y que probablemente no tendría mucho dinero para comprar algo realmente lindo, me dejó muy claro que podría usar cualquier prenda que yo elija».
Christina Meador
Christina decidió que compraría algo especial que además pudiera utilizar más de una vez y como su hermana le recalcó que podía ponerse lo que quisiera, se arriesgó y compró un disfraz que quería hace mucho tiempo.
«Bueno, ella dijo ‘lo que quisiera’, y si iba a gastar más de 50 dólares, quería que fuese un disfraz de dinosaurio, porque son fantásticos y siempre había querido uno. Le escribí para que se riera, ¡y sorprendentemente le gustó la idea!».
Christina Meador
Christina dudó un instante en presentarse disfrazada de dinosaurio el día de la boda, pero la misma novia pensó que sería una gran idea. De todas formas, compró un vestido al llegar al lugar del matrimonio en caso de que Deanna se arrepintiera.
Eso no sucedió y el día de la boda Christina salió de la casa vestida de dinosaurio, fue recibida por uno de los padrinos y se quedó a un lado del altar mientras su hermana se casaba. Los invitados quedaron totalmente impactados al verla.
«¡Hacía mucho calor dentro del disfraz! Me acuerdo de estar sorprendida ya que todos estaban haciendo su mayor esfuerzo para evitar mirar al dinosaurio, pero era complicado ver con el disfraz. Me lo saqué apenas terminó la ceremonia, para disfrutar de la recepción y la fiesta con el vestido que había comprado antes».
Christina Meador
Luego de la ceremonia, Christina publicó una foto del evento en donde indicó que no se arrepentía de nada. Rápidamente la imagen se volvió muy popular y todos celebraron el gran sentido del humor de Christina y su hermana.
Sin duda dejó a todos desconcertados, pero valió la pena.